¿Qué harías si tuvieras una máquina que pudiera retroceder o avanzar en el tiempo?. Seguro verías los momentos más importantes de tu vida o de tus seres queridos.

Te invito en un viaje en el cuál retrocederemos en el tiempo, pero sin ninguna máquina especial, sólo vos, éste texto y un montón de recuerdos...de cómo se creó nuestro colegio... 

Hace muchos años que se fundó nuestra escuela, con esperanzas, sacrificio y sobre todo mucho amor.

Nuestro barrio era un basural, (sabías que los pisos de nuestra escuela están rellenos de basura?), el de todo Buenos Aires y vivían en el familias muy humildes, en casas bajas y de lata.

Tres hermanas, la Hna. Felisa, la Hna. Antonia y la Hna. Mary, viendo a esta gente pobre, decidieron con un gran gesto de bondad y solidaridad ayudarlos, hacían obras de caridad, enseñaban mecanografía, corte y confección, a tocar instrumentos y tenían coro de niños.

Más adelante, como la cantidad de personas iba aumentando, decidieron fundar una escuela, para ello hicieron recitales con cantantes famosos, recaudando fondos para llevar a cabo su deseo.

En 1949, se les permitió abrir su esperada escuela, pero no era lo que hoy vemos, sino un pequeño cuarto de madera era jardín de infantes, luego con el paso del tiempo se construyeron los demás grados, uno por uno, cada año. Pero este colegio al que hoy asistimos muchos chicos y chicas, se abrió solo para mujeres. Tiempo después lo hicieron mixto.

Nuestra querida escuela sufrió a través del tiempo, diferentes modificaciones en cuanto a lo edilicio, pero sigue conservando en sus paredes y maestros, el mismo amor que tenían las hermanas fundadoras.

Nosotros somos encargados de seguir manteniendo este afecto que surge de todos los corazones.